Por Jorge Regla
El 26 de octubre del 2019, el caso del robo de un libro en Argentina llamó la atención a nivel internacional, pero ¿Qué libro robaron fue que llamó tanto la atención de los medios? ¿Era un ejemplar único e invaluable que lo hacía tan cotizado para querer robarlo?
Pues resulta que no, el libro se trataba de “Giacomo Cassanova” del autor Guy Chaussinand-Nogaret y esto sucedió en la librería “El Ateneo Gran Splendid”, una famosa librería ubicada en la ciudad de Buenos Aires y cualquier persona que cuente con $590 (mxn) para invertir en un libro podría adquirirlo ¿Pero entonces por qué llamó tanto la atención esta noticia?
Este hurto fue sonado, no por el libro o el autor, sino por quien lo robó, y es que se trató de Oscar Ricardo Valero Recio de 74 años de edad, quien en ese entonces fungía como embajador de México en Argentina. El diplomático fue aprendido de inmediato por el personal de seguridad de la librería al ser captado por las cámaras de vigilancia y posteriormente consignado a las autoridades, que al enterarse de quién se trataba, quedaron atónitos de por qué este personaje robaría este libro.
A pesar de identificar al embajador, la autoridad decidió actuar conforme a la Ley y seguir con la denuncia. Sin embargo, únicamente se levantó un acta ya que Oscar Valero contaba con inmunidad diplomática, aunque las autoridades argentinas notificaron a la Cancillería de México, quien a su vez ordenó al embajador que regresara de inmediato al país a esclarecer todo este asunto.
“Pero ¿Cómo?, ¿Por qué haría eso?, ¡Qué vergüenza!, deberían quitarle el cargo de inmediato” fueron unos de los muchos comentarios en contra del embajador que se dejaron ver a través de las redes sociales al salir a luz esta noticia. Y es que sí, resulta difícil asimilar que una persona que representa a todo el gobierno de un país en el extranjero cometa un acto como este.
Al enterarme de esta noticia tan peculiar, llegó casi de inmediato una idea a mi cabeza: podría tratarse de un síntoma de algún trastorno neurocognitivo. Y sí, semanas posteriores la Dra. Ana Sosa del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía de México confirmó que se trataba de un síndrome caracterizado por alteraciones conductuales a causa de un tumor cerebral.
Hoy en día son muchos los tipos de trastornos neurocognitivos, conocidos comúnmente como demencias, que se han estudiado. En el caso del ahora ex embajador, se podría decir que es una demencia por tumor cerebral en la parte frontal del cerebro, causando alteraciones en la conciencia, el juicio, impulsividad y alteraciones en la conducta. Seguramente has escuchado el Alzheimer, Parkinson o demencia vascular, pues todos esos son considerados trastornos neurocognitivos y cada uno tiene síntomas y tratamientos diferentes.
Es importante no etiquetar o juzgar las acciones de una persona que vive con demencia, ya que en realidad es una manifestación de una condición como la demencia, que es progresiva e irreversible, sin embargo es importante la detección temprana para un adecuado tratamiento (farmacológico y no farmacológico) de los síntomas que se pueden generar, pero sobretodo la adecuada preparación de los familiares, cuidadores y sociedad en general para evitar reproches y linchamientos a las personas, que por su condición, inevitablemente realizan conductas u olvidan cosas, se desorientan, entre otras.
El respeto, la empatía y la información son elementos fundamentales para construir una sociedad más digna.